Usamos Trisoplast en la industria, en vertederos y en muchos lugares más, y al hacerlo ayudamos al medio ambiente, en el sentido más amplio de la palabra. Utilizando un paso de fauna por encima de la A2 y una vía de ferrocarril entre Eindhoven y Weert, aportamos nuestro granito de arena ecológico.

Paso de fauna

Las áreas naturales de Weerterbos, Weerterbergen y Budelerbergen forman un bonito territorio verde en la frontera entre Limburgo y Noord-Brabant. Este entorno, que mide unas 900 hectáreas, es un lugar importante para la nidificación de aves y está formado por bosques de coníferas, brezales y arenales. Algunas interrupciones de este entorno son una línea de ferrocarril, la autopista A2 y dos carreteras locales que cruzan la reserva natural. Para proteger al máximo a los animales y no perturbar la naturaleza, se decidió colocar un paso de fauna por encima de esta infraestructura. De este modo, las autoridades provinciales tienen la esperanza de que mamíferos grandes y pequeños, así como anfibios, puedan desplazarse y reproducirse en la zona. Trisoplast se ocupó de impermeabilizar de este paso de fauna, que está formada por dos puentes: uno que pasa por encima de la A2, y otro que pasa por encima de la línea férrea entre Eindhoven y Weert. El puente (Weerterbergen) toma el nombre del entorno natural y forma parte de un programa de varios años de duración llamado «Revertir la fragmentación» (ontsnippering, en holandés), que incluye la construcción de otros pasos de fauna para conectar distintas zonas naturales entre ellas. Así, los animales podrán desplazarse de una a otra sin problemas. Para Trisoplast es un placer poder participar en este proyecto. Para que los animales disfruten de todavía más tranquilidad durante esta larga travesía, se ha instalado un bebedero a ambos lados del paso de fauna. Con un aislamiento sostenible de Trisoplast, por supuesto.

Colaborar en la búsqueda de soluciones

Trisoplast está formado en más de un 99% por elementos naturales, y establece un puente literal y metafórico entre naturaleza y técnica. El aspecto natural contribuye a los objetivos ecológicos del proyecto, que originalmente tenía un techo de alquitrán. Colaboramos con el contratista para encontrar el diseño idóneo. Trisoplast tiene un contacto perfecto con la superficie de hormigón, de modo que el paso de agua entre estas dos capas es imposible. Los pequeños diques de Trisoplast son una solución sencilla que impide que el agua de la tierra del puente se drene demasiado deprisa. La junta entre el tablero del puente y el estribo se mueve a menudo debido a la dilatación y la contracción provocada por los cambios de temperatura. En este punto se ha aplicado una capa extra espesa de Trisoplast, con lo que se han ahorrado medidas de transición más caras.